Pepe Hanan
@PepeHanan
Los tiempos se cumplieron, la mala racha que aqueja al equipo camotero desde hace siete semanas, hizo crisis.
La derrota al son de cuatro goles a uno frente al León del sábado pasado prendió los focos rojos en la directiva camotera.
Puedo adelantarle que la relación del estratega pampero con la directiva camotera estaba ya desgastada, y sobre todo con el director deportivo Walter Fleita con quien las discrepancias futbolísticas los tienen no muy de acuerdo.
Se dice que Marini dejó de escuchar, que se volvió autónomo desde que fue visto con buenos ojos por otros equipos, que sintió que podía sólo y que ya ni a los auxiliares les hace caso, lo cual en caso de seguir, tendrá que corregir si no quiere al final verse sólo en el desierto futbolístico, ojalá reaccione el Dt para bien, pues de que es una buena persona, ni dudarlo.
Por otro lado, tal parece que el interior del vestidor se convirtió en una especie de tribus donde los grupos predominan y cada quien jala con su cada cual, es decir, los argentinos Alustiza, Campestrini y Cejas por su lado, en otro frente los uruguayos tratando de hacer lo suyo y por último los mexicanos entre los que existe cierta molestia por la forma en la que Marini ha distribuido en últimas fechas las alineaciones haciendo a un lado a gente que venía cumpliendo como Paco Torres, Gutiérrez Armas y Alberto Acosta quienes fueron prácticamente borrados de la alineación titular.
Todo esto que le platico, fortalecido por las indisciplinas de Campestrini con sus expulsiones a quien, según declaró a un medio nacional, ‘no le gusta que le metan el dedo’, lo que no aclaró fue a qué se refería con esa expresión, si al arbitraje, al cuerpo técnico o a su directiva.
Lo cierto es que los argentinos se han hecho uno sólo y en bloque respaldan al arquero en su postura quienes a últimas fechas entre problemas personales (lamentables por cierto) y expulsiones, como es el caso del goleador Alustiza y en otro caso por no ser tomado en cuenta como es el caso del ‘Pitu’ Cejas, han tenido una casi nula participación en los partidos, lo cual sin duda ha mermado el poder futbolístico del equipo camotero.
Las horas de Marini podrían estar contadas, sin embargo, a tres fechas de que termine el torneo, no se sabe si sería lo más adecuado, aunque si el grupo como parece se le ha salido de las manos por distintas situaciones y conociendo el problema porcentual que aqueja al equipo angelopolitano, lo más sano sería que alguien fresco llegara aunque fuera de manera interina para tratar de sumar lo más posible de estos nueve puntos que aún estarán en disputa y que sin duda a la larga pudieran definir el próximo descenso.
Por otro lado, mucho me han preguntado si existen adeudos a los jugadores, situación que he investigado pero según me dijeron, la semana pasada se les pagó la quincena y solo se debe la que va corriendo, situación que está más que normal y sin motivo para que los jugadores estén inquietos e intranquilos.
No queda más que esperar noticias oficiales para saber si Marini se queda hasta el final de temporada o la directiva toma la determinación de removerlo del cargo, aunque, insisto, a tres jornadas del final, lo veo difícil.
La directiva se dará esta semana a la tarea de hablar con los jugadores y hacerles ver la importancia de los últimos puntos y sobre todo porque viene la renovación de contratos y ahí se valorarán las actuaciones finales de cada uno de los integrantes del equipo.
Sólo la unión y el compromiso de todos los integrantes del club le podrían dar la posibilidad al Puebla de terminar la temporada de manera decorosa.
Los números de la BUAP
Los universitarios terminaron la temporada perdiendo al son de cuatro goles por uno en Mérida frente a Venados.
Lo lamentable es que, incluso ganando el partido, los resultados que se necesitaban para calificar tampoco se dieron con lo cual la temporada terminó para ellos.
Haciendo un balance del año futbolístico de los universitarios, nos encontramos con que fueron el segundo equipo que más puntos sumó con 47 unidades para un porcentaje de 53 % de puntos obtenidos, lo cual no es nada despreciable, considerando que es una liga complicada donde existen intereses económicos importantes que pretenden ascender a primera división.
En los próximos días el equipo romperá filas para tomar un periodo de vacaciones y posteriormente regresar a los entrenamientos.
Ya sobre la marcha se sabrá qué determinaciones toma la directiva con respecto a los refuerzos y a la continuidad de jugadores y cuerpo técnico.
Nosotros como siempre seguiremos en línea. Hasta la próxima.
