Hoy como cada martes tuvimos sesión con nuestra psicóloga Pipis Planell quien en esta ocasión nos habló sobre el autocastigo.
Es un acción que resulta muy compleja y que deriva de la culpa. El autocastigo genera un verdugo que nos atormenta. Tras vivir algún momento emocional fuerte el individuo puede generar en su vida autocastigarse por la culpa que siente a tener o no participación en ese evento. Por ejemplo, el no poder tener una relación de pareja porque creemos que no lo merecemos, es un ejemplo de autocastigo.
La culpa, emoción negativa que nos lleva al autocastigo, es metafóricamente hablando, como una costra que tiene varias capas que necesitan ser sanadas para poder seguir con nuestra vida.
Es importante no quedarnos con la idea de que el «el tiempo cura todo» porque en realidad no es del todo así, más bien el tiempo más la terapia psicológica es como podemos salir adelante.
La culpa sólo sirve en pequeñas cantidades, para regalarnos, para darnos cuenta de que alguna acción que hicimos estuvo mal, la cuestión es no cargar con esta emoción de manera permanente.