Con lo sucedido con Ana Gabriela Guevara, senadora postulada por la coalición PRD, MC y PT en la elección del 2012 y que es parte de la bancada de este último partido, porque son necesarios mínimo cinco miembros para integrar fracción parlamentaria y obtener prerrogativas sustanciosas, las que en el PT maneja el senador priísta Manuel Bartlett -hasta donde se no ha renunciado a ese partido- dinero del que se pagaba el salario de sus candidatos a diputados bajo las siglas de MORENA, por cierto, con ese suceso, decía, me puse a pensar que estamos inmersos en un proceso electoral donde hay de todo, insultos, traiciones, acomodos, demagogia, mentiras y farsas mil. pero no hay actividad política.
Porque la política es oficio noble, de gente que aspira a mejorar las condiciones de vida de sus semejantes, que se preocupa por lo que será de las generaciones por venir. que trata de mejorar los modos de representación popular, que quiere dignificar el trabajo, que busca como respetar los derechos humanos con plenitud y cosas así.
Nada de esto observamos en las campañas electorales actuales; lo que vemos es un esfuerzo por llenar de lodo al adversario y por ocultar la inmundicia propia, una falta de respeto al ciudadano y un intento de verle la cara a través de regalos, panfletos y pendones – entre otras cosas – que lo distraiga de lo importante y lo lleve a avalar candidatos sin méritos políticos. en su gran mayoría.
En resumen, tenemos campañas electorales pero no ideas políticas a considerar.
