Torneo de baja calidad
La pandemia del COVID-19 ha terminado por arrastrar a la mayoría de los equipos de fútbol en el mundo.
Mucho hablamos de Club Puebla en nuestra ciudad y el desánimo que rodea a sus aficionados al darse cuenta que entre ventas realizadas y adquisiciones, el resultado viene siendo negativo, al menos en el papel.
Sin embargo, la mayoría de los equipos mexicanos tendrán que realizar ajustes en sus planteles para tratar de subsanar en la medida de lo posible la falta de ingresos tanto en taquilla como en las reducciones que ha realizado la televisión dentro de los ajustes económicos, debido a la pandemia.
La franja se ha abocado a tratar de conseguir jugadores de la Liga de Expansión que le puedan dar resultados a un muy bajo costo.
Criticable, sí, aunque hasta cierto punto se puede entender, debido a las terribles pérdidas que vienen sufriendo la mayoría de los equipos.
Ya será labor del técnico argentino Nicolás Larcamón el saber conjuntar a un grupo de hombres y no de nombres para sacar adelante a la escuadra, pues, honestamente, en el papel no se ven buenas posibilidades de tener un buen torneo ante la falta de jugadores desequilibrantes, sobre todo en la ofensiva, donde todo parece indicar se mantendrá Santiago Ormeño en el eje del ataque acompañado por Tabo y Fernández más el ‘Fideo’ Álvarez, quienes tendrán que cargar con la responsabilidad de convertir goles para la escuadra camotera.
Estamos a diez días del inicio de las hostilidades en un torneo en el que al parecer se tendrán que mantener los estadios cerrados al menos hasta Semana Santa según los pronósticos de los supuestos expertos en el tema.
Seguiremos observando los partidos por televisión con la esperanza de que esta pesadilla llamada ‘COVID-19’ se diluya con el paso de los meses.
Aprovecho este espacio para desearle a usted amigo lector un mucho mejor año 2021 y esperando que las cosas mejoren para todos.
Gracias por su lectura y comprensión.
Nosotros como siempre seguiremos en línea.
Hasta el año que entra.
